Por Claudia Muñiz / FUNDENL – Partido de los Comunistas.
En días recientes hemos sido testigas y testigos, una vez más, del infierno en el que vivimos desde hace décadas en México. El reciente hallazgo del campo de exterminio, en el rancho Izaguirre, ubicado en Teuchitlán, Jalisco, ha sido una patada en la cara para todas y todos. Este campo de exterminio, de acuerdo con los testimonios de víctimas que lograron salir de ahí, llevaba en operación más de 13 años, es decir más de 2 sexenios presidenciales.
Los horrores que se vivieron en ese campo de exterminio son la muestra más cruda del contexto social en el cual nos encontramos y lo más lamentable es que Teuchitlán, desgraciadamente, no es un caso aislado. A nivel nacional existen y han existido cientos de campos de exterminio en Nuevo León, Tamaulipas, Guerrero, Sonora, la lista es larga.
Actualmente en México existen más de 123 mil personas desaparecidas, esto según datos “oficiales”, pero siempre hay que recordar que no todas las desapariciones son denunciadas. Vivimos en un país dónde hemos contabilizado más de 5,000 fosas clandestinas en todo el territorio, zonas de exterminio que han existido y siguen existiendo y ninguna autoridad gubernamental ha hecho NADA, y esto debemos de gritarlo y señalarlo.
En México, todos los partidos políticos electorales tienen las manos manchadas de sangre. Fue y sigue siendo el Estado el responsable de esta barbarie por acción u omisión, fue y sigue siendo el Estado el responsable de todos los crímenes de lesa humanidad y el genocidio que vivimos.
En este país nada ha cambiado por tener ahora una mujer presidenta. Claudia Sheinbaum, al igual que sus antecesores, está mostrando lo poco o nada que le importa la tragedia que vivimos y ha cerrado las puertas de su Palacio a las madres que han tocado su puerta.
Hoy muchas y muchos de los de arriba, se han acercado a ofrecer “apoyo” a las madres y familias buscadoras, buscando expiar sus culpas y aparentar que a ellos también “les duele” y esto también hay que gritarlo y señalarlo, son unos sinvergüenzas que no tienen la mínima decencia.
Hoy, Teuchitlán nos reúne y nos convoca a miles de personas a nivel nacional, personas que ya estamos hasta la madre de todo lo que hemos estado viviendo. Hoy, Teuchitlán, es una muestra dolorosa del odio que los que mal gobiernan este país tienen en contra del pueblo y ante esto, yo hago un llamado a solidarizarnos y cubrir a las madres y familias buscadoras SIEMPRE y aunque nos sea difícil de digerir, ser conscientes que hasta en el lugar más recóndito de esta patria, hay una familia que está buscando a un ser querido.
Salgamos todas y todos a las calles, paremos este país, NOS ESTÁN DESAPARECIENDO, NOS ESTÁN ASESINANDO, nuestra tarea debe de ser parar esta barbarie.
Campos de exterminio, ¡NUNCA MÁS!
¡Desaparecidxs! ¿Dónde Están? ¡Hasta Encontrarles!